domingo, 29 de marzo de 2015

El Éxito tiene raíz y anclaje en el pensamiento

logros, riquezas y exito
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“Todo logro, toda riqueza, tiene su principio en una idea”. Napoleón Hill



            Tal como te comenté en este post, iré compartiendo contigo reflexiones e información sobre lo que he ido conociendo y aprendiendo de la filosofía de Napoleón Hill para lograr avanzar y conseguir materializar los deseos,

 para ir llevando nuestra vida en la dirección que elijamos y darle el rumbo que soñamos, a pesar de las situaciones, condiciones o personas que, actualmente, pudieran ser una limitación o piedra de tranca para obtenerlos…

indistintamente, incluso, de nosotros mismos, si es que estamos decididos a dejar de auto sabotearnos.

La reflexión sobre lo que hoy te comentaré, tiene su base en el libro “Piense y hágase rico” de Napoleón Hill (te lo recomiendo ampliamente)

Allí él expresó “EL SECRETO” que ha ayudado a cientos y miles de personas a lograr el éxito en sus vidas.

perseverar hasta lograr los objetivos
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La determinación de triunfar… detenerse jamás.

         Cuenta Napoleón Hill en su libro “Piense y hágase Rico”:

            “Poco después de que Darby se doctorase en la “Universidad de los porrazos” y decidiera aprovechar su experiencia…, tuvo la buena fortuna de estar presente en una ocasión que le demostró que “NO” no significa necesariamente que no”.

            Una tarde ayudaba a su tío a moler trigo en su viejo molino. Su tío dirigía una granja grande, donde vivían cierto número de arrendatarios de color. La puerta se abrió silenciosamente, y una niña, hija de uno de los arrendatarios, entró y se situó junto a la puerta

            El tío levantó la vista, miró a la niña y gritó con aspereza:

-¿Qué quieres?

- Mi mamá dice que le mande cincuenta centavos- respondió, humilde, la niña

- Ni hablar- replicó el tío-, y ahora vete a tu casa

-Sí, señor- dijo la niña, pero no se movió

El tío siguió con su trabajo, tan ocupado que no prestó atención a la niña y no se dio cuenta que no se había marchado. Cuando volvió a levantar la mirada y la vio allí parada, gritó:

-¡He dicho que te vayas a tu casa!. Ahora, márchate o te daré una paliza

- Sí, señor- dijo la niña, pero siguió inmóvil

El tío dejó un saco de grano que estaba por echar en la tolva del molino, cogió una duela de barril y empezó a acercarse a la niña con una expresión poco tranquilizadora…

Cuando el tío llegó donde estaba la niña, ella dio un rápido paso al frente, le miró a los ojos y gritó con todas sus fuerzas:

-¡Mi mamá necesita esos cincuenta centavos!

El tío se detuvo, la miró unos instantes, y luego dejó lentamente la duela de barril a un lado, se metió la mano en el bolsillo, sacó medio dólar y se lo dio a la niña.

Ella cogió el dinero y se encaminó despacio hacia la puerta, sin quitar los ojos del hombre al que acababa de vencer.

Después de que la niña se hubo marchado, el tío se sentó en una caja y permaneció mirando por la ventana durante más de diez minutos. Estaba reflexionando, sorprendido, sobre la derrota que acababa de sufrir”

¿Cuál crees que sea la moraleja de esta historia?

Pensamiento, motivación y acción…
actuar para cumplir pensamientos y deseos
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         Leí por primera vez “Piense y hágase rico” en enero del 2010, desde entonces, muchas cosas han pasado: fracasos temporales y, como consecuencia, crecimiento interior.

            Un tiempo después, el retomar los libros de la filosofía de Napoleón Hill me permite ver con claridad cómo estaba mi mente en ese entonces en relación al día de hoy.

            Ciertamente, el proceso de abrazar el éxito en la vida, como quiera que éste sea visto, depende de cada persona y de lo mucho o poco que tenga que desaprender para aprender

            Tal como dice Napoleón Hill, “La riqueza empieza con un estado mental”, y así es para todo logro en la vida.

            Entender que todo cuanto existe y nos pasa tiene su base inicial en la mente, en nuestra mente, es algo que vamos digiriendo paulatinamente, con el paso del tiempo.

            Resulta más fácil, al comienzo, antes de conocer este principio, pensar que cuanto nos ocurre de desagradable es responsabilidad de alguien más, y así sentirnos menos responsables por las consecuencias de lo que nos pasa.

            Pero, tarde o temprano, para quienes deciden tomar el control del timón del barco de sus vidas, comprender y aceptar que nos generamos todo lo que nos ocurre, es el primer paso para avanzar hacia el éxito sin retornos.

            Así comenzamos a desaprender los hábitos del fracaso para comenzar a aprender el arte de cambiar de enfoque: del fracaso al éxito (como dice Napoleón  Hill)

            Y luego de aceptar que somos causa de lo que tenemos como vida, entonces podemos ver y saber que está en nuestras manos el poder para mejorarla o cambiarla completamente, tal como cuando se tiene masa para modelar en las manos y podemos hacer con ella lo que nos plazca.

            Con la visión clara que eres el escultor de tu vida, entonces necesitarás poner todo el poder de tu pensamiento en dirección hacia el logro de la meta o metas que quieras alcanzar

            Recuerda, lo primero es: Acepta que eres el responsable de cuanto te ocurre.

            Luego, comienza a cambiar tu enfoque: Piénsate a ti mismo:

             Saca provecho de las experiencias que llaman “fracasos”

              Tómate tiempo, cada día, para pensar, para estudiar los fracasos que has tenido y busca en ellos el conocimiento que puede llevarte al éxito

              Pregúntate por qué no lograste materializar lo que deseabas

            Pregúntate qué había o qué ha habido en tu mente que bloqueó o sigue bloqueando el logro de tus objetivos

            Evita ser condescendiente contigo mismo y no te mientas. Afróntate en la verdad. Total, en tu mente sólo tú puedes tener acceso.

            Piénsate, revísate y analízate desde la oportunidad para aprender y no desde el reproche y la auto flagelación.

            Decide qué harás desde el punto de partida donde estás ahora y… comienza a actuar

            Lo que no has podido lograr es un excelente medio de aprendizaje para crecer y triunfar si lo tomas desde el enfoque del éxito.

            Cada aparente fracaso no es otra cosa que una forma de saber cómo no se hace o no conviene buscar el logro de algo.

De la mano del ejercicio del pensamiento consciente (pensarse a sí mismo), está la motivación, el sentimiento que ha de acompañar a la idea, es decir, el deseo por hacerla realidad.

            Si alguna idea por emprender que nos surja no está sazonada de suficiente deseo, estará destinada a marchitarse como una planta ornamental a quien nadie riega y muere por falta de atención y de agua.

            Como consecuencia de la unión del enfocarse en una idea y sumarle el deseo por obtenerla, viene automáticamente la acción, el empuje por hacerla realidad, por materializarla.

            Siempre, cada idea ha de estar impregnada, casada, con el deseo o la   motivación suficientemente grande, intensa, como para no abandonarla sino abrazarla de una forma tal que nada sea tan difícil como para impedir que le des vida.

un objetivo claro nos ayuda a lograr el exito
Un propósito definido… un objetivo de vida

         Te has preguntado: ¿Qué es lo que más quieres hacer o tener en la vida?  y ¿Por qué lo deseas?

            Si ya tienes un propósito u objetivo de vida y estás claro por qué lo quieres… te felicito. Sino, este momento puede servirte para comenzar a pensar en ello.

            Tener un objetivo en la vida hace que tu mente trabaje en función de esa meta y comiences a ver y encontrar las oportunidades que te irán acercando al logro de tu sueño.

            Mientras más preciso es lo que deseamos obtener, mayores serán las oportunidades que se presenten para alcanzarlo.

            Si tu objetivo está claro en tu mente, estás convencido de que quieres lograrlo y tienes el intenso deseo de hacerlo realidad, sin importar los obstáculos que se te presenten en el camino, entonces la única opción posible para ti será tener éxito con tu idea.

            Ahora, y esto es importante, hay dos consideraciones que has de tomar en cuenta:

            1.- Cuida que tus metas no violen la Ley Universal, es decir, las leyes de Dios y los derechos de otros.

            2.- La oportunidad para lograr tu objetivo puede presentarse en forma diferente y dirección distinta a la que esperas. Así que deberás estar atento, pues ella podría presentarse ante ti en la forma disimulada de un fracaso temporal… Por eso mucha gente no logra reconocerla.

            Tener claro tu propósito u objetivo de vida, te permitirá estar más claro en todo. Sabrás qué es lo que quieres, harás el ejercicio de pensarte conscientemente, de evaluar si lo que quieres es beneficioso también para los demás y aprovecharás a la caprichosa oportunidad cuando se presente, aunque esté disfrazada

            Porque la claridad de ideas en tu mente te mantendrá alerta y despierto a todo lo que se vincule con ella

Pensamiento creativo… un ejercicio necesario
pensar en positivo
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            Hill sostiene que para ejercer la impresionante capacidad de dirigir nuestros pensamientos, controlar las emociones y ordenar nuestro destino, debemos pagar un precio: TIEMPO

            Así que es necesario dedicar un período de treinta minutos diarios para el pensamiento creativo y concentrarse en los objetivos personales.

            Durante este proceso, es necesario mantener la mente en aquellas cosas que quieres y alejar lo que no se quiere o no se debería querer.

Es importante que te habitúes a recordar tu propósito principal: al levantarte, al acostarte y varias veces durante el día

            La razón de hacerlo de esta manera es para ayudar a tu mente a reconocer constantemente aquello que le ayudará a alcanzar el objetivo que te has propuesto

            pues nuestro computador humano (el cerebro) está programado para la repetición.

            Revisar diariamente los progresos que estés haciendo para alcanzar tu propósito, te ayudará a saber por dónde vas y a hacer los ajustes y correcciones necesarios para no desviarte de tu objetivo.

cambiar el enfoque del fracaso al exito
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Sugerencias para finalizar este post…

         Comienza por aplicar el cambio de enfoque del fracaso al éxito en ti mismo, en tus hábitos… en el cambio de tu actitud hacia ti y hacia la vida

            Ve dando pasos, aunque pequeños y poco notorios a los ojos de otros, que sean firmes y seguros,

            Haz el ejercicio de pensarte conscientemente… sentirás los avances y el deseo de no volver atrás en reacciones y conductas que te han hecho daño y que han dañado a otros

            Avanza, paso a paso, con tu objetivo o propósito, si ya lo tienes, sino anímate a iniciar este recorrido que te ayudará a conocerte y encontrarte… te garantizo que valdrá la pena.


            Me despido por hoy, recordándote que si quieres invitar a alguien a considerar estas ideas sobre el arte de cambiar de enfoque del fracaso por el éxito, puedes compartir este post por las redes sociales…

Te deseo una excelente semana

Un gran abrazo… nos leemos en el próximo post.


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