![]() |
imagen de Fotolia |
Se trata de aprender a saber qué dar y
entregar de ti y en qué medida darlo.
Dicen
que todos los extremos son dañinos…
¿Alguna vez te ha pasado
que habiendo dado todo lo que tenías
para dar, al final no resultó?
Puede
que te haya ocurrido en un trabajo, una relación de pareja, en situaciones
familiares o con amigos
El punto es que después de haber
sentido que lo diste todo y después ya no funcionó, la sensación
que deja ver el rompecabezas, que estaba ya armado, convertido en un
montón de piezas rotas, es como para hacer una de estas tres cosas:
Respirar profundo y continuar
adelante,
Darse el permiso de sentirse mal y derrotado o... Que nos demos el permiso de sentirnos mal, vivir nuestro duelo y después, respirar profundo y seguir adelante.
Darse el permiso de sentirse mal y derrotado o... Que nos demos el permiso de sentirnos mal, vivir nuestro duelo y después, respirar profundo y seguir adelante.
La cuestión es que, andando el
tiempo, y cuando ya creemos que el pasado quedó atrás, a veces, ocurre que las
huellas psicológicas y emocionales de ese pasado siguen estando calladitas
dentro de la memoria y al menor indicio que levante un poquito de polvo… zas!!...Hacen
su entrada triunfal otra vez
Me refiero, por ejemplo, cuando se
ha tenido una relación de pareja o un trabajo en el que te has entregado, así
de simple
Y luego el día menos pensado, una
frase de “adiós contigo” es más o menos como ésta:
“ Tú has sido excelente, te voy (o
te vamos) a extrañar, pero es tiempo que dediques espacio a tus cosas… te has entregado
mucho a esta relación (o trabajo) y por eso es mejor decir adiós”
Sorprendente, cierto?... Pero así
como hay a quienes los despachan por no dar, pues también se despacha por dar
demás
Y el tiempo lo cura todo…
Así que, en ese conflicto de equilibrio que pueda
generarse en la mente, con sus “por mi culpa, por mi culpa” y sus “por qué esto
o por qué lo otro”
![]() |
tiempo al tiempo imagen de fotolia |
Aparece, al cabo de un tiempo, la
moderada reflexión, fruto de ese mismo paso del tiempo que nos hace ver que...
Mejor es lo que pasa
Y terminamos agradeciendo que las
cosas hayan pasado así… de otra manera, por esa extraña forma de amor que
llegamos a sentir, no nos hubiésemos ido cuando eso era lo que nos tocaba
hacer.
Luego logramos ver en perspectiva y
comprendemos, muy dentro de nosotros, un montón de detalles y cosas que de no
ser por haber cambiado el enfoque, no las hubiésemos visto.
Lamentablemente, a través del dolor
aprendemos mucho… no es la idea, pero esa vía es la única alternativa
posible cuando no somos capaces de ver y anticiparnos a las situaciones para
evitar consecuencias y errores que nos pesarán en el alma.
Aquello que en un primer momento nos parecía algo
imposible o difícil de soportar y superar,
Hoy no es más que una experiencia
importante que nos hizo crecer y madurar
Si vuelven a aparecer las huellas
psicológicas y emocionales que nos han dejado el sabor amargo que sigue al entregarse demasiado, y ésta
vez para no dejarnos entregar nada, entonces caeremos en el otro extremo
¿Cómo
saber que esas huellas reaparecen?
Porque
cuando las nuevas experiencias demandan entrega de nosotros y descubrimos que hay
algo que nos frena, que tenemos la tendencia a no querer ceder ni dar nada, a
no dejarnos fluir, es porque el pasado está afectando nuestro presente
Entonces,
lo mejor es revisar dentro de sí qué tan afectados estamos y decidir
cómo enfrentar el bloqueo.
Una buena opción podría ser permitirse vivir la nueva
experiencia pero, ésta vez, con la conciencia que el punto medio es el
equilibrio, es decir,
cuidarnos de sopesar lo que entregamos de nosotros…
Recordemos
que tu
medida, tu balanza, la manejas tú
Al
fin y al cabo,
Ni mucho
ni poco… ese es el punto de equilibrio.
¿Cómo
saber medir ese equilibrio?
NO DES
TANTO QUE TE QUEDES SIN TI,
NI TAN
POCO QUE NADIE PUEDA DISFRUTARTE…
Me despido deseándote una semana de
equilibrios…
Si quieres
hacer saborear a otros estas reflexiones, compártelo…
Un
gran abrazo…. Nos leemos en el próximo post… Feliz semana!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por contactar esta página.